Ernesto Zepeda gana batalla legal contra Livia Brito tras cinco años
El fallo de la Suprema Corte marca el cierre definitivo del caso y representa una victoria simbólica para la libertad de prensa en espacios públicos.
Después de cinco años de proceso judicial, el fotógrafo Ernesto Zepeda celebró una contundente victoria legal contra la actriz Livia Brito, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación desechara el último recurso de revisión presentado por la defensa de la actriz. El fallo confirma la sentencia que la obliga, junto con su entonces pareja Mariano Martínez, a pagar una indemnización por daño moral cercana a los 1.23 millones de pesos.
El conflicto comenzó en junio de 2020 en una playa de Cancún, cuando Zepeda fue agredido por la pareja mientras realizaba su labor fotográfica. Según el testimonio del fotógrafo, fue golpeado, despojado de su equipo de trabajo y sufrió lesiones físicas, además de afectaciones económicas y emocionales.
El caso derivó en una demanda civil interpuesta en 2021 y una sentencia a su favor dictada en 2023. Brito apeló la resolución, pero el pasado 25 de junio la Suprema Corte cerró el proceso legal al desechar el amparo de revisión.
“Ha sido un proceso largo, pero ya la SCJN desechó la revisión de su amparo y confirmó la sentencia donde deben indemnizarme”, expresó Zepeda. “Esa era la última instancia, en donde ella incluso dijo en Instagram que ponía en debate nacional el tema, tratando de justificarse una vez más y no hacerse responsable. Ya tendrá que pagar cuando el juez lo determine”.
Zepeda explicó que, aunque la sentencia es por más de un millón de pesos, estima que recibirá alrededor de la mitad, una vez descontados los gastos legales. No obstante, destacó el valor simbólico y legal de este fallo, que considera un precedente importante para la protección del trabajo periodístico en espacios públicos.
Además, el fotógrafo respondió a quienes han puesto en duda la dignidad de su labor, especialmente en redes sociales, donde Brito intentó enmarcar el caso como una discusión sobre la privacidad.
“Es una parte del juego de los famosos, en el cual a ellos les gusta mostrar su lado amable. Los paparazzis éramos los únicos que podíamos dar a conocer lo que ellos hacían. Tomar a una persona que es figura pública en un lugar público es válido; la privacidad es dentro de un lugar privado, así que yo creo que es muy válido”, explicó.
Finalmente, Zepeda señaló que Brito y Martínez deberán acordar cómo cubrir la indemnización en conjunto, tal como lo establece la sentencia. Mientras tanto, considera que se ha hecho justicia, no solo para él, sino para toda una comunidad de trabajadores del espectáculo cuya labor, afirma, ha sido deslegitimada sin fundamento.
