Operar un albergue es "devolver a la vida lo que me ha dado": Don Luis

Casa Amiga es un refugio temporal que se ubica en Hermosillo en donde Don Luis prepara el desayuno de unas 70 personas y hace labores administrativas

Entre alimentos, colchonetas y acciones administrativas, Luis Manuel Castro Leyva, a sus 73 años de edad, cocina para las personas migrantes que están de paso por el centro de Hermosillo y llegan en busca de refugio al albergue "Casa Amiga".

Operar un albergue es devolver a la vida lo que me ha dado: Don Luis

En entrevista, "Don Luis", como coloquialmente es conocido, dijo que ha llegado a cocinar hasta para 70 personas por día. Indicó que, si bien el albergue suele atender a hombres y mujeres por igual, hay requisitos que las personas deben atender para poder quedarse en el lugar.

Operar un albergue es devolver a la vida lo que me ha dado: Don Luis

"Aquí hay requisitos que tienen que cumplir, que son: no consumir alcohol ni drogas y recibimos a puro mayor de edad", indicó.

Don Luis antes era vaquero y administraba el "Old West", donde hacía bailes y conoció a varios personajes importantes como Sergio Vega, Valentín Elizalde, a los integrantes de los grupos Laberinto y Apache, y aparte hacía "bailes románticos" con la música de Los Seris y Los Solitarios, "hasta una vez traje a Leo Dan", añadió.

Don Luis llegó al albergue por "azares del destino", después de pensionarse, comenta que trabajó como banquero por muchos años y era mejor conocido como "El Señor Castro".

"Voy al centro y todo mundo me conoce, me conocían por el Señor Castro, ahora soy Don Luis", destacó.

Operar un albergue es devolver a la vida lo que me ha dado: Don Luis

Don Luis comienza su día a las 2 de la mañana para preparar el desayuno, pero también realiza actividades administrativas.

"A las 2 de la mañana llego, les hago el desayuno, me voy a caminar y a las 6 de la tarde les preparo la cena, después de las 8 entro a la administración a la oficina recibiendo donaciones y llevando la contabilidad", señaló.

En el albergue, las personas tienen la opción de llegar, cenar, lavar ropa, ver televisión, dormir, y levantarse para un rico desayuno de Don Luis.

Orgulloso de su trabajo, Luis Manuel expresó que se siente feliz ya que sus hijos y nietos le ayudan los domingos, "entienden la necesidad", indicó.

También destaca la importancia de devolver a la vida lo que le ha dado,

"La vida me ha dado buenos padres, hermanos, hijos, y nietos, entonces yo tenía que darle algo más a la vida, después de todo lo bueno que me ha dado", concluyó.

Don Luis ayuda día con día a las personas migrantes, pero también recibe donaciones de la comunidad y los invita a que apoyen con artículos de limpieza y alimentos no perecederos que pueden dejar en el albergue "Casa Amiga".