SCJN ordena liberar a Juana Hilda González, presa en 2006 por "caso Wallace"
La Primera Sala de la Suprema Corte declaró nula su confesión al considerar que fue obtenida bajo tortura; fue sentenciada a 78 años por el secuestro de Hugo Alberto Wallace.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó este miércoles la liberación inmediata de Juana Hilda González Lomelí, quien pasó 19 años en prisión acusada del secuestro y homicidio de Hugo Alberto Wallace, hijo de la activista Isabel Miranda.
Con cuatro votos a favor y uno en contra, la Primera Sala del máximo tribunal del país concedió un amparo a González Lomelí al considerar que su proceso estuvo viciado por violaciones graves al debido proceso, entre ellas, el uso de pruebas obtenidas mediante tortura.
De acuerdo con el fallo, la confesión que sustentó la acusación en su contra no fue libre ni voluntaria, sino derivada de presiones, amenazas e intimidaciones sufridas durante su arraigo, en febrero de 2006. En consecuencia, la Corte declaró nula su declaración y todas las pruebas obtenidas a partir de ella.
Al invalidar estos elementos, la SCJN concluyó que el resto de las pruebas presentadas por el Ministerio Público no eran suficientes para acreditar la responsabilidad penal de la acusada más allá de toda duda razonable.
Juana Hilda fue detenida por la entonces Procuraduría General de la República (PGR) el 10 de enero de 2006. Posteriormente fue procesada y sentenciada en 2009 a 78 años y 9 meses de prisión por los delitos de secuestro, delincuencia organizada y posesión de armas de uso exclusivo del Ejército.
Su caso forma parte del conocido como "caso Wallace", iniciado en julio de 2005 tras la desaparición del empresario Hugo Alberto Wallace. Su madre, Isabel Miranda, encabezó una intensa campaña pública y mediática que derivó en la detención de varios presuntos responsables, entre ellos Brenda Quevedo, Jacobo Tagle, César Freyre y los hermanos Castillo Cruz.
Desde hace más de una década, abogados, periodistas y organizaciones de derechos humanos han cuestionado la solidez del caso y denunciado presuntas irregularidades, incluyendo tortura, fabricación de pruebas y uso indebido del poder.
El Instituto Federal de Defensoría Pública, que representa legalmente a Juana Hilda y a otros coprocesados, señaló que esta resolución es relevante no sólo por su impacto en la libertad de su representada, sino porque sienta un precedente para casos donde la tortura sigue siendo utilizada como herramienta en procesos judiciales.
Se espera que Juana Hilda González sea liberada en las próximas horas del penal federal femenil de Morelos, donde permanecía internada tras pasar por distintas cárceles del país.
CON INFORMACIÓN DE AGENCIAS