Sentencian al feminicida de Keila Nicol; aún faltan restos de la menor

Cristian Iván 'N', de 16 años, confesó el feminicidio en juicio abreviado. Familiares y colectivos critican la falta de justicia plena.

A más de cuatro meses del feminicidio que conmocionó a Baja California, Cristian Iván 'N', de 16 años, fue sentenciado a cinco años de prisión por el asesinato de Keila Nicole Duarte Acevedo, una niña de 13 años cuyo cuerpo fue hallado mutilado el pasado 2 de julio en el poblado de El Rosario, municipio de San Quintín.

De acuerdo con el semanario Proceso, la resolución fue emitida el viernes 7 de noviembre, tras la celebración de un juicio abreviado en el que el joven aceptó su responsabilidad penal. La condena impuesta corresponde a la pena máxima establecida por la Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia Penal para Adolescentes.

El magistrado Álvaro Castilla Gracia, titular de la Sala Especializada en Justicia para Adolescentes del Tribunal Superior de Justicia del Estado, explicó que este marco jurídico, junto con el artículo 201 del Código Penal, permite la aplicación de un procedimiento abreviado cuando el imputado reconoce los hechos y acepta las medidas sancionatorias.

Con ello, Cristian Iván deberá cumplir cinco años de internamiento en un centro especializado, sin posibilidad de recibir una condena mayor por tratarse de un menor de edad.

El feminicidio de Keila Nicol ocurrió el 1 de julio, cuando la adolescente salió de su casa en compañía del hoy sentenciado rumbo a una zona conocida como "la cueva". Antes de desaparecer, alcanzó a enviar un mensaje de texto a una amiga, expresando miedo porque su acompañante "traía un palo".

Durante la búsqueda, las autoridades localizaron únicamente partes del cuerpo de la menor; a la fecha, algunos restos continúan sin ser hallados.

La investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE) determinó que el joven guardaba dibujos de figuras humanas desmembradas y confesó haberse inspirado en la serie televisiva Dexter para cometer el crimen.

Tras su detención, la familia de Keila Nicol exigió que el agresor fuera juzgado como adulto. En medio de la indignación social, tres policías municipales de San Quintín fueron separados e investigados por presunta omisión, luego de que no se atendiera de inmediato el reporte de desaparición.