Dan el último adiós a migrante fallecido en redada en EU
Su cuerpo, dentro de un ataúd de madera adornado con flores blancas y rojas, fue acompañado por decenas de vecinos, familiares y amigos, quienes lo despidieron en el panteón municipal.
Jaime Alanís, michoacano que falleció intentando huir de una redada del Servicio de inmigración y Control de Aduanas (ICE) en California, Estados Unidos (EU), tuvo su último adiós en su natal Zinapécuaro.
Su cuerpo, dentro de un ataúd de madera adornado con flores blancas y rojas, fue acompañado por decenas de vecinos, familiares y amigos, quienes lo despidieron en el panteón municipal.
De acuerdo con reportes de medios locales, el cuerpo del migrante fue recibido por su esposa e hija en la pequeña comunidad Huajúmbaro, que en el año 2020 contaba con poco más de mil 500 habitantes, según datos del Inegi.
El cuerpo del connacional llegó al Aeropuerto de Guadalajara el viernes, informó el Jefe de la Unidad para América del Norte, Roberto Velasco.
Alanís vivió sus últimos días en una cama de hospital por las múltiples fracturas que sufrió al haber caído de un edificio de nueve metros, mientras trataba de esconderse del personal de ICE.
El 10 de julio, el migrante se encontraba en su lugar de trabajo, un campo con licencia para el cultivo de mariguana y otros productos agrícolas en Camarillo, California, conocido como 'La Tomatera', cuando oficiales llegaron con órdenes de cateo.
El operativo a la empresa Glass House Farms resultó en alrededor de 300 migrantes en situación irregular detenidos.
"La versión que les dan a ellos (los familiares de Alanís) es de que él se cayó de treinta pies de altura, que viene siendo de los techos de las bodegas donde se trabaja en el campo. Pero también se ha manejado muchas versiones donde los agentes de inmigración golpearon a personas que se encontraron escondidas en diferentes lugares", informó al siguiente día de la redada un reportero del medio Mexicanos en Seattle desde la habitación del hospital en donde internaron a Alanís.
El michoacano fue llevado al Centro Médico del Condado de Ventura luego de la caída y fue tratado por múltiples fracturas. Sufrió una grave lesión en el cuello y traumatismo craneoencefálico.
Finalmente, el sábado 12 de julio, falleció mientras contaba con soporte vital.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), a través del Consulado en Oxnard, apoyó a la familia para la repatriación del cuerpo, el cual tuvo un servicio funerario en California, antes de ser trasladado a México vía aérea.
"El pasado lunes, en representación del Gobierno de México, Vanessa Calva, y personal del Consulado en Oxnard, atendieron los servicios funerarios en la localidad", detalló Velasco el viernes.