Aumento del impuesto a refrescos no cerrará tienditas, asegura Sheinbaum

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo descartó que el incremento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) aplicado a los refrescos y bebidas azucaradas provoque el cierre de tiendas o un aumento del comercio informal, y defendió la medida como una estrategia para mejorar la salud pública en el país.

“No tiene sustento”, dice Sheinbaum

Durante su conferencia en Palacio Nacional, la mandataria federal reconoció que existen preocupaciones entre comerciantes por el aumento de este impuesto, pero subrayó que el objetivo principal del gobierno es reducir el consumo de bebidas con alto contenido de azúcar.

“No, no, no va a ocurrir, no tiene sustento. Las bebidas azucaradas se venden en el último rincón del país, y el objetivo –entiendo su preocupación– desde nuestra perspectiva es que se consuma menos”, declaró.

Sheinbaum explicó que el consumo excesivo de refrescos “provoca daños a la salud”, como la diabetes y la hipertensión, enfermedades que representan una de las principales cargas para el sistema de salud mexicano.

Recaudación con sentido social

La presidenta adelantó que los recursos obtenidos por el aumento del IEPS serán destinados precisamente a la atención de padecimientos relacionados con el consumo de azúcar.

“Con lo que se recaude con este impuesto se destinará para atender diabetes y hipertensión”, indicó.

Apoyo ciudadano a la medida

Sheinbaum destacó que las encuestas más recientes reflejan que la mayoría de los mexicanos considera dañino el consumo de refrescos y estaría de acuerdo en que se cobre un impuesto más alto a estas bebidas, siempre que el objetivo sea promover alternativas más saludables.

“Debe promoverse el consumo de bebidas más saludables”, insistió.

Al ser cuestionada sobre si el impuesto también se mantendrá para bebidas azucaradas y sueros orales, la mandataria respondió de forma breve y contundente: “Sí”.