El ejército de Israel ataca el este y sur de Líbano
Bajo pretexto de combatir a la organización terrorista Hezbolá, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu ordenó atacar el este y sur de Líbano
El Ejército israelí ha llevado a cabo en las últimas horas de este domingo una oleada de ataques contra distintas localidades en la región de Becá y en el sur de Líbano, en lo que han defendido reiteradamente como objetivos del partido-milicia chií Hezbolá.
"Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron recientemente varios emplazamientos militares, infraestructuras de almacenamiento y producción de armas estratégicas y una base de lanzamiento de cohetes pertenecientes a la organización terrorista Hezbolá en la región de Becá y el sur de Líbano", ha indicado en su cuenta de la red social X, sin dar más detalles al respecto.
La agencia de noticias libanesa NNA ha confirmado un ataque de un "helicóptero israelí" contra la localidad de Marun al Ras, en el distrito de Bint Jbeil (sur) y otro con "ametralladoras desde su posición recién establecida de Tallet al Hamams, hacia la llanura de Marjayún" (sureste).
Por su parte, el diario libanés 'L'Orient-Le Jour' ha informado de que también han sido objetivo del Ejército israelí los municipios de Bodai y Flaui, ambos ubicados en la gobernación de Baalbek, en el este de Líbano, además de las inmediaciones de Nabi Chit, cerca de la frontera sirio-libanesa.
Asimismo, en el sur de esta frontera las tropas israelíes han atacado la localidad de Kfar Kila, mientras que en la zona meridional del país han alcanzado el distrito de Sidón, así como las afueras de Burj Rahhal, en el distrito de Tiro.
Las autoridades libanesas no han registrado hasta el momento víctimas de estos ataques, si bien 'L'Orient-Le Jour' ha indicado que dos efectivos de los equipos de emergencias han resultado heridos en el sur del país al volcar su ambulancia cuando se dirigían al lugar de uno de los ataques aéreos.
Israel justifica este tipo de ataques contra Líbano argumentando que actúa contra actividades de Hezbolá y que, por ello, no viola el alto el fuego pactado en noviembre, si bien tanto Beirut como el grupo se han mostrado críticos con estas acciones, igualmente condenadas por Naciones Unidas.
El pacto, alcanzado tras meses de combates al hilo de los ataques del 7 de octubre de 2023, contemplaba que tanto Israel como Hezbolá debían retirar sus efectivos del sur de Líbano. Sin embargo, el Ejército israelí ha mantenido cinco puestos en el territorio de su país vecino, algo también criticado por las autoridades libaneses y el grupo chií, que exigen el fin de este despliegue.