Más de 200 mil fieles despiden al Papa Francisco en Roma

El sábado, una multitud estimada en cerca de 200 mil personas, incluidos numerosos jóvenes, participó en la misa especial presidida por el cardenal Pietro Parolin, en honor al Pontífice argentino.

Miles de personas acudieron este domingo a la Basílica de Santa María la Mayor para visitar la tumba del Papa Francisco, quien fue sepultado allí tras un emotivo funeral celebrado el día anterior en la Plaza de San Pedro.

Sobre su tumba de mármol blanco, sencilla y sobria como él deseaba, reposa una rosa blanca junto a la inscripción 'Franciscus' en latín. Una suave luz ilumina el sepulcro, donde también se observa una reproducción de su cruz pectoral.

El sábado, una multitud estimada en cerca de 200 mil personas, incluidos numerosos jóvenes, participó en la misa especial presidida por el cardenal Pietro Parolin, en honor al Pontífice argentino. Muchos de los jóvenes presentes habían viajado a Roma con motivo de la esperada canonización de Carlo Acutis, evento que quedó en segundo plano tras el fallecimiento del Papa.

La emotividad se reflejó en los testimonios de los fieles. Rosario Correale, quien viajó desde Salerno, expresó su profunda emoción al visitar la tumba, mientras que Elias Caravalhal, residente en Roma, señaló que acudió a agradecerle "por todo lo que hizo".

Durante la visita, el flujo de personas era constante; muchos se santiguaban o capturaban imágenes con sus teléfonos, mientras el personal de la Basílica pedía avanzar para permitir el acceso a todos.

El funeral en la Plaza de San Pedro estuvo marcado no solo por el recogimiento religioso, sino también por su carácter político. Más de 50 mandatarios y una docena de monarcas acompañaron a la jerarquía católica en el último adiós, mientras unas 160 delegaciones diplomáticas estuvieron presentes.

Roma se convirtió en un fuerte dispositivo de seguridad debido a la presencia de líderes como Donald Trump, Emmanuel Macron, Keir Starmer, Javier Milei, Luiz Inácio Lula da Silva, Daniel Noboa, Xiomara Castro y Rosa Icela Rodríguez, quien representó a México.

Finalizada la misa, el féretro recorrió seis kilómetros hasta llegar a Santa María la Mayor, en un histórico cortejo abierto para que los ciudadanos se despidieran de su líder espiritual.

Francisco fue finalmente enterrado en una ceremonia privada, tal como había solicitado, cerrando así su último viaje entre su pueblo.