Ramón Urías deja 'tendido' a su exquipo en el Daikin Park
Ramón no conectó imparable en los seis turnos, y registró par de ponches. Sin embargo, respondió a la hora cero, y le otorgó la victoria a su novena en el segundo juego de la serie.
Con un batazo oportuno de Ramón Urías, los Astros de Houston dejaron tendidos en el terreno a los Orioles de Baltimore al imponerse 5-4 en 12 entradas, en duelo celebrado en el Daikin Park.
Ramón no conectó imparable en los seis turnos, y registró par de ponches. Sin embargo, respondió a la hora cero, y le otorgó la victoria a su novena en el segundo juego de la serie.
La victoria fue para Enyel De Los Santos, quien trabajó dos entradas de relevo sin permitir daño, mientras que Keegan Akin cargó con la derrota.
'El Conejo' responde a la hora cero
La historia del juego comenzó temprano, cuando la novena 'espacial' tomó ventaja en la segunda entrada con un imparable productor de Mauricio Dubón. En el cuarto rollo, Houston amplió el margen con sencillos de Jacob Melton y de Carlos Correa, que impulsaron a Cam Smith y Dubón para colocar el 3-0 en la pizarra.
Sin embargo, los Orioles respondieron de inmediato. En la quinta, Dylan Carlson sacudió un cuadrangular de dos carreras ante Jason Alexander, batazo que viajó 385 pies con velocidad de salida de 107.1 millas por hora para acercar a su equipo 3-2.
José Altuve, con todo y la presión, volvió a dar oxígeno a los Astros en la séptima entrada, al conectar un vuelacercas solitario que puso las cosas 4-2. Pero Baltimore no tardó en devolver el golpe: en la octava, Jackson Holliday se voló la barda con Carlson en circulación para empatar 4-4 y mandar el juego a extrainnings.
El suspenso se extendió hasta el inning número doce, donde la escena quedó lista para el de Magdalena, Sonora. Urías tomó turno frente a Keegan Akin y, sin esperar mucho, atacó el primer lanzamiento con un rodado dentro del cuadro. Lo que parecía una doble matanza terminó convertido en la jugada que definió el encuentro, pues la velocidad del 'Conejo' superó el disparo a primera y permitió que Correa llegara al plato con la carrera de la victoria.