Fallece Javier Bátiz, ícono del rock mexicano y mentor de Carlos Santana

Bátiz falleció este sábado 14 de diciembre tras una prolongada lucha contra el cáncer, según informó su esposa, Claudia Madrid, a través de redes sociales.

El mundo de la música despide a Javier Bátiz, legendario guitarrista mexicano y una de las figuras más influyentes en la historia del rock y el blues en México.

Bátiz falleció este sábado 14 de diciembre tras una prolongada lucha contra el cáncer, según informó su esposa, Claudia Madrid, a través de redes sociales.

"Queridos amigos y familia, para informarles que nuestro adorado y querido, mi esposo Javier Batiz trascendió el día de hoy. Su legado y su música quedan para la eternidad. Te amo, amor mío. Vuela alto, mi ángel", expresó Madrid en un emotivo mensaje acompañado de una fotografía de ambos.

Nacido en Tijuana, Javier Bátiz comenzó su carrera musical a los 14 años, revolucionando la escena del blues y el rock en México.

Conocido por su virtuosismo y pasión, fue mentor de Carlos Santana, a quien conoció cuando este tenía apenas 11 años. Santana, considerado hoy uno de los mejores guitarristas del mundo, aprendió las bases de su técnica y estilo bajo la guía de Bátiz, quien siempre destacó el talento nato de su pupilo.

"Aprendió luego-luego a tocar como yo. Lo que le enseñaba, me lo devolvía como 40 veces", relató Bátiz en una entrevista.

La relación entre ambos no sólo marcó sus vidas, sino también la historia de la música, cimentando un vínculo que, según Bátiz, nunca estuvo basado en la competencia, sino en el compañerismo y el amor por la música.

Aunque enfrentó serios problemas de salud en los últimos meses, incluidos complicaciones por neumonía y altos niveles de glucosa, Bátiz mantenía su optimismo y la esperanza de volver a tocar la guitarra, la cual definió como su motor de vida.

Javier Bátiz deja un legado imborrable como precursor del blues en México y como inspiración para generaciones de músicos. Su deseo de reencontrarse en el escenario con Carlos Santana en un gran concierto quedó como un sueño que no se concretó, pero su influencia seguirá viva en cada nota y acorde que resuene en la historia del rock.