El ocaso de la democracia
"El ocaso de la democracia", escribe Marco A. Paz Pellat en #ElPoderdelasIdeas
En su libro El ocaso de la democracia, Anne Applebaum analiza el progresivo deterioro de las instituciones democráticas en occidente, destacando el papel de las élites políticas e intelectuales en este proceso.
Para la autora, el declive de la democracia no es consecuencia directa de crisis económicas o sociales, sino de un fenómeno más complejo: la polarización política y cultural alimentada por la traición de ciertos líderes e intelectuales que han abandonado los valores democráticos en favor de agendas autoritarias.
Applebaum describe cómo antiguos aliados en la defensa de la democracia liberal han pasado a promover discursos xenófobos, homofóbicos y conspiranoicos, rompiendo alianzas y amistades del pasado.
En países como Polonia y Hungría, partidos como Ley y Justicia (PiS) y Fidesz han implementado estrategias dirigidas a consolidar el poder: el control de los medios de comunicación, la manipulación de los sistemas judiciales y la difusión de teorías conspirativas que justifican sus acciones antiliberales. Estos gobiernos han logrado reconfigurar las instituciones públicas para servir a intereses partidistas y personales, debilitando principios como el Estado de derecho y la independencia judicial.
Un concepto central en el análisis de Applebaum es el de la "Mentira Mediana". A diferencia de las "Grandes Mentiras" de los regímenes totalitarios del siglo XX, las democracias iliberales modernas recurren a narrativas que, aunque no completamente desconectadas de la realidad, construyen una percepción distorsionada del enemigo político.
Estas narrativas, habilitadas por el control de los medios y las redes sociales, fomentan la desconfianza hacia las élites tradicionales y refuerzan una visión autoritaria del poder.
Para la escritora, este fenómeno también refleja un descontento más amplio con los sistemas meritocráticos y competitivos, percibidos por algunos como corruptos o excluyentes. En este contexto, líderes autoritarios presentan un "nuevo orden" basado en la lealtad personal y en narrativas nativistas, prometiendo corregir las injusticias del sistema actual. Sin embargo, esta búsqueda de poder suele estar motivada más por resentimientos personales y ambiciones frustradas que por una verdadera ideología política.
La autora concluye que la democracia no está garantizada y puede desmoronarse en cualquier sociedad bajo las condiciones adecuadas. Sin embargo, este declive no es inevitable.
Applebaum hace un llamado a revalorizar los principios del pluralismo, la transparencia y la legalidad y a enfrentar las narrativas autoritarias con un compromiso renovado hacia la defensa de las instituciones democráticas.
El libro es, en esencia, una advertencia urgente sobre los peligros del autoritarismo y una reflexión sobre cómo preservar la democracia en un mundo cada vez más polarizado.
Ante los tiempos que vivimos en el mundo y nuestro país, juzgue más pertinente darle la palabra a Anne Applebaum para reflexionar y repensar lo que nos esta pasando.