Trump desafiante ante la ONU y la crisis en Gaza
"Trump desafiante ante la ONU y la crisis en Gaza", escribe Irene Selser en #Entrevías
Un Donald Trump desafiante y confrontativo, aún más sarcástico y autoglorificante de lo habitual, se presentó este martes ante la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York, en el primer discurso de su segundo mandato. Durante casi una hora, el presidente estadounidense utilizó el escenario del organismo internacional en su 80.º aniversario, para reafirmar el poderío de Estados Unidos frente a aliados y adversarios.
En varias ocasiones, Trump criticó directamente a la ONU por su “burocratismo” e “inoperancia”, burlándose incluso de fallos técnicos como un teleprompter defectuoso y una escalera mecánica averiada. Señaló que la ONU produce “palabras vacías”, mensajes sin seguimiento ni acción real y rechazó lo que considera la tibieza de los organismos internacionales.
Trump fue precedido por el presidente brasileño, Lula da Silva, quien alertó sobre la amenaza a los ideales fundacionales de la ONU -paz, prosperidad y multilateralismo- y denunció las sanciones arbitrarias, intervenciones unilaterales y ataques a la soberanía como prácticas cada vez más comunes. Propuso medidas urgentes como reducir el gasto militar, aumentar la ayuda al desarrollo, aliviar la deuda externa de los países más pobres y establecer estándares globales de impuestos para que los súper ricos paguen más. También reivindicó la reciente condena judicial al expresidente Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado, lo que provocó que Trump impusiera aranceles de 50% a la mayoría de bienes brasileños, en lo que calificó de “caza de brujas” (“witch hunt”).
En medio de su discurso y de las tensiones diplomáticas entre ambos países, Trump se dio tiempo para la chanza y dijo que Lula le “cae bien” y “parece una buena persona”, al mencionar un breve encuentro entre ambos en los pasillos de la ONU. A propósito, anunció que se reunirán la próxima semana, en un gesto de posible deshielo en las relaciones.
Además de atacar a la ONU, Trump criticó el globalismo y las políticas climáticas, calificándolas de “gran estafa”. Reforzó una visión de Estados Unidos en su “edad de oro”, fustigó duramente la migración y la política de fronteras abiertas, así como las energías verdes y se autopresentó como el “pacificador global” (“terminé siete guerras”) por lo cual, insistió, “merezco el Premio Nobel de la Paz”.
En ningún momento, Trump hizo referencia a la reducción de la financiación estadounidense a la ONU y a organismos de control, lo que debilita los mecanismos internacionales que limitan la proliferación de armas y conflictos. Tampoco mencionó sus presiones a la Unión Europea para que aumentara su gasto en defensa a 5% del PIB (más de un billón de dólares anuales) superando el objetivo anterior de 2%, ni su condicionamiento al suministro de armas a Ucrania a que los países europeos asuman la mayor parte del costo; además de instar a la alianza atlántica OTAN a financiar la guerra de Israel en Gaza.
Al respecto, el secretario general de la ONU, António Guterres, que habló antes que Lula da Silva, alertó sobre la proliferación de crisis sin control, la impunidad y el riesgo de una guerra nuclear sin cuartel. Destacó que, por cada dólar invertido en la construcción de la paz, el mundo gasta 750 dólares en armas de guerra, calificando esto de insostenible e indefendible y mencionó las situaciones críticas en Sudán y Gaza. Subrayó que los principios fundacionales de la ONU están bajo asedio y enfatizó en la necesidad de implementar de inmediato las medidas provisionales dictadas por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para proteger a los civiles en la franja palestina.
El mundo ha entrado “en una era de perturbación imprudente y sufrimiento humano implacable”, dijo Guterres, advirtiendo que los pilares de paz y progreso “están cediendo bajo el peso de la impunidad, la desigualdad y la indiferencia”. Señaló que los principios fundacionales de la ONU están bajo asedio y, respecto al conflicto en Gaza, recordó que las medidas provisionales dictadas por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) son vinculantes y deben implementarse de inmediato, especialmente para proteger a los civiles. Con esto hizo referencia al dictamen del 26 de enero de 2024 de la CIJ, emitido tras una denuncia presentada por Sudáfrica sobre el riesgo plausible de genocidio por parte de Israel.
Trump criticó el reconocimiento al Estado de Palestina por parte de varios países (en total 157, una amplia mayoría dentro de los 193 países con asiento en la ONU), calificándolo de “recompensa para Hamás”.
Aprovechó su discurso para atacar la decisión de diez países, entre ellos Francia, Bélgica, Canadá Reino Unido, de reconocer el Estado palestino a días del segundo aniversario del 7 de octubre de 2023, cuando el ataque masivo de Hamás contra Israel desató la actual ofensiva en Gaza que ha dejado cerca de 65 mil 400 muertos y 167 mil heridos. Más de 300 mil personas han huido de Ciudad de Gaza en las últimas dos semanas, en medio de la ofensiva israelí por la ocupación de la capital.
El premier israelí Benjamin Netanyahu tiene previsto hablar ante la ONU el viernes y reunirse con Trump el lunes siguiente en Washington, en su cuarto encuentro desde enero. En un video difundido el pasado domingo, Netanyahu afirmó que “no habrá un Estado palestino” al oeste del río Jordán (Cisjordania), como respuesta al reconocimiento formal de Palestina por el Reino Unido, Canadá y Australia. Agregó que Israel seguirá ampliando sus asentamientos en Cisjordania, pese a que la ONU los considera ilegales. Desde el 7-O, más de mil palestinos han muerto en Cisjordania por operaciones militares israelíes y colonos extremistas. Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este deben ser parte del futuro Estado palestino.
En su intervención este martes en la ONU, el presidente de Chile, Gabriel Boric, también se refirió a Gaza, calificándola como “una crisis global porque es una crisis de la humanidad”, y denunció la barbarie. Dirigiéndose a Netanyahu, afirmó: “No quiero verlo destrozado por un misil junto a su familia; quiero verlo, junto a los responsables del genocidio contra el pueblo palestino, enfrentando un tribunal de justicia internacional”.