Una mujer heroica
"Una mujer heroica", escribe Pbro. José Martínez Colín en #VivirenCristiano
1) Para saber
“La verdadera compasión significa no sólo sentir el dolor ajeno, sino también conmoverse para ayudar a aliviarlo" (Daniel Goleman). Al reflexionar sobre la “Parábola del Buen Samaritano” el Papa León XIV subrayó la necesidad de compadecerse para con el necesitado.
El relato se suscita cuando un experto en la Ley le pregunta a Jesús sobre quién es el prójimo a quien hemos de amar. Y aunque era una persona preparada necesita cambiar de perspectiva, porque está concentrado en sí mismo y no se da cuenta de los demás. Nuestro Señor le contesta con la parábola: En un camino un hombre es asaltado, golpeado, y abandonado medio muerto. Un sacerdote y un levita, aunque son personas del Templo, no se compadecen y pasan de largo. Pero llega un samaritano, que era despreciado, y se compadece: se acerca, le limpia las heridas con aceite y vino y las venda; lo carga en su montura; lo lleva a una posada donde paga "dos denarios", lo de dos días de trabajo; se compromete a volver y, si es necesario, a pagar más, porque el otro no es un paquete a entregar, sino alguien que cuidar.
La compasión se expresa a través de gestos concretos, dice el Papa, que la prisa no impida sentir compasión. Porque sólo se ayuda de verdad si se está dispuesto a acercarse, implicarse, ensuciarse, a sentir el peso del dolor del otro.
2) Para pensar
Sin ir muy lejos, a nuestro alrededor se encuentran esos “buenos samaritanos”. Tal es el caso de una enfermera heroica sinaloense. Cuando estaba la epidemia, la administración del Hospital General de Culiacán dio a conocer su historia: Ella es Lilia Lemus Huízar. En 2020 había sufrido el fallecimiento de sus hermanas Yolanda y Evangelina, víctimas del Covid-19. Ella era jefa de piso de traumatología y cuando el área fue destinada a la atención de pacientes con coronavirus decidió quedarse allí sirviendo a riesgo de su vida. Pospuso su jubilación para salvar vidas. Luego falleció una tercera hermana: Erika Fabiola. Aunque Lilia también enfermó, pudo superar la enfermedad.
En Lilia vemos el ejemplo de quienes arriesgan su vida para salvar la ajena. Cabe decir que Lilia fue una enfermera fundadora del Hospital
General de Culiacán, trabajando desde que abrió en mayo de 1990. En un congreso, afirmaba Lilia: “Agradezco a Dios formar parte de este equipo y le pido a Dios que me siga dando la oportunidad y poder abrir el nuevo hospital y ahí cumplir mi misión antes de irme”.
3) Para vivir
Decía el Papa que la parábola nos pide reflexionar sobre nuestra capacidad de detenernos en el camino de la vida, de poner al otro por encima de nuestra prisa. Nos pide estar dispuestos a reducir las distancias, a gastar de lo nuestro, porque el prójimo es alguien cercano. Y se preguntaba: ¿cuándo seremos capaces de interrumpir nuestro viaje y tener compasión? Cuando comprendamos que ese hombre herido nos representa a cada uno de nosotros. El Papa nos animó a recordar las veces que Jesús se detuvo para cuidarnos, y así ser más capaces de compasión. Invitó a rezar para pedir la gracia de tener cada vez más los mismos sentimientos del corazón de Cristo.
Como decía el expresidente Ronald Reagan: "No podemos ayudar a todo el mundo, pero todo el mundo puede ayudar a alguien".
Pbro. José Martínez Colín
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