USDA ordena nuevo cierre al ganado mexicano por brote en Veracruz
El nuevo caso de gusano barrenador en Veracruz detuvo la reapertura gradual de cinco cruces fronterizos. El USDA exige más acciones de México para controlar la plaga.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) ordenó el cierre inmediato de los puertos fronterizos del sur al comercio de ganado, bisontes y caballos provenientes de México, tras detectarse un nuevo caso de gusano barrenador del Nuevo Mundo en el estado de Veracruz.
El hallazgo fue confirmado por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) en el municipio de Ixhuatlán de Madero, ubicado a unos 600 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, lo que encendió las alarmas del gobierno estadounidense, que apenas el 7 de julio había iniciado una reapertura gradual de cinco cruces fronterizos, entre ellos Agua Prieta, Sonora.
“El nuevo caso compromete gravemente el cronograma de reapertura portuaria delineado del 7 de julio al 15 de septiembre”, señaló el USDA en un comunicado oficial emitido este 9 de julio, al confirmar que el secretario de Agricultura, Brooke Rollins, ordenó el cierre inmediato de los puertos al comercio ganadero para proteger el hato nacional y la cadena alimentaria.
Se trata de la segunda vez en el año que se cierra la frontera al ganado mexicano por esta plaga, ya que el 11 de mayo se impuso una cuarentena tras los primeros brotes en el norte de Oaxaca y Veracruz. El nuevo caso detectado ahora se localiza a más de 250 kilómetros al norte de la zona de dispersión de moscas estériles, estrategia utilizada para contener el avance del gusano barrenador.
“Estamos pausando la reapertura de puertos prevista para continuar con la cuarentena y combatir esta plaga mortal en México”, declaró Rollins, quien urgió al Gobierno mexicano a demostrar avances sustanciales en el control de la plaga para retomar el comercio.
El USDA anunció además que continuará con visitas de verificación en territorio mexicano para evaluar las medidas sanitarias implementadas por las autoridades nacionales. A la par, avanza la construcción de una planta de dispersión de moscas estériles en el sur de Texas, como parte de un plan de contingencia para evitar el ingreso del gusano barrenador a Estados Unidos.