Tesla se beneficiará de los aranceles automotrices del 25% impuestos
Los nuevos aranceles del 25% a las importaciones de automóviles anunciados por el presidente Donald Trump afectarán a la mayoría de los fabricantes, excepto a Tesla, cuya producción nacional le permite sortear el impacto financiero.
La industria automotriz estadounidense enfrenta un fuerte impacto tras el anuncio del presidente Donald Trump de imponer aranceles del 25% a las importaciones de automóviles y piezas clave a partir de la próxima semana. Sin embargo, Tesla, el fabricante de vehículos eléctricos liderado por Elon Musk, podría ser uno de los pocos beneficiados gracias a su extensa capacidad de producción dentro de Estados Unidos.
Los nuevos gravámenes afectarán a los vehículos de pasajeros, camionetas ligeras y componentes esenciales como motores, transmisiones y sistemas eléctricos, aplicándose únicamente a la parte no estadounidense de los vehículos y piezas importadas bajo acuerdos de libre comercio con Canadá y México.
Tesla, el gran ganador
Tesla cuenta con grandes fábricas en California y Texas que producen todos los automóviles que vende en Estados Unidos, lo que le otorga una ventaja competitiva sobre otros fabricantes internacionales que dependen de la importación de vehículos y piezas.
El analista de CFRA Research, Garrett Nelson, destacó que Tesla es la automotriz "menos expuesta" a los aranceles debido a su operación totalmente nacional. Además, la empresa comunicó en su red social X que sus modelos son "los automóviles más fabricados en Estados Unidos".
Rivales en desventaja
Mientras Tesla se posiciona como el principal beneficiado, sus competidores internacionales, como Hyundai Motor, Volkswagen y General Motors, enfrentan un desafío significativo. Hyundai, en particular, podría ser una de las más afectadas, ya que, aunque tiene fábricas en Alabama y Georgia, importó más de un millón de vehículos a Estados Unidos el año pasado, lo que representa más de la mitad de sus ventas en el país.
Incluso Ford Motor podría experimentar un impacto menos severo que otros fabricantes, ya que el 80% de los vehículos que vende en Estados Unidos se fabrican localmente. Sin embargo, los fabricantes que dependen de componentes importados desde Asia y Europa verán un aumento significativo en los costos de producción.
Impacto moderado para socios comerciales
Aunque los aranceles afectan principalmente a vehículos y piezas importadas de fuera de América del Norte, el acuerdo comercial entre Estados Unidos, Canadá y México establece que los aranceles sobre piezas de estos países no entrarán en vigor inmediatamente. Además, el impacto se suavizará en vehículos cuya cadena de suministro cruce repetidamente la frontera.
Un golpe para la competencia
El plan de expansión de 21,000 millones de dólares anunciado por Hyundai en Estados Unidos no será suficiente para compensar el golpe económico, ya que la mayor parte de sus ventas sigue dependiendo de vehículos importados. Esto pone a la compañía en una posición vulnerable frente a Tesla, que consolida su liderazgo en el mercado nacional.
